
Así como lo leyeron en el título, este lago; que por cierto es el lago navegable más grande del mundo, dio origen a la civilización Inca. Guarda en sus aguas esta hermosa leyenda:
El dios INTI (Sol) formó el lago TITIKAKA (puma de piedra) de sus lágrimas y de este emergieron sus hijos Manco Cápac y Mama Ocllo; ambos con la misión de fundar el imperio Inca. Para ello se les fue entregado una vara de oro, mismo que debía ser clavado en el suelo de cada poblado al que llegaran; el lugar donde esta vara se hundiera, sería el lugar elegido para el imperio.
Emprendieron su camino hacia el norte, cruzando varios lugares en los que la vara de oro no se hundía pero la gente de los alrededores iban siguiendo a Manco Capac; después de varios meses de recorrer el antiplano llegaron a un valle fértil con abundante vegetación e imponentes montaňas. Cuando clavaron la vara en el suelo, esta se hundió por completo, señalando finalmente el territorio donde se fundaría el gran imperio Inca.
Manco Capac se encargó de enseñar a los hombres el arte de cazar, el trabajo de la tierra, construcción y la guerra. Mama Ocllo por su lado se encargó de enseñar a las mujeres el arte del tejido.
Y así se origina la civilización Inca cuyos territorios se nombraron CUZCO, que se expandieron y fueron heredados de generación en generación a los descendientes de Manco Capac y Mama Ocllo. De entre los incas más importantes en ésta genealogía se encuentra el Inca Pachacutec, a quien se le atribuye la construcción de Macchu Picchu. Y finalmente el imperio Inca terminó con la llegada y conquista de los españoles. Pero eso ya es otra historia, así que volvamos al TITIKAKA.

Este lago se encuentra por sobre los 3.800 metros sobre el nivel del mar y esto lo convierte en el lago navegable más alto del mundo y uno de los más grandes de Sudamérica. Tanto así que su tamaño se compara con el país Puerto Rico. Territorialmente en la actualidad está dividido entre los países de Bolívia (Copa Cabana) y Perú (Puno); nuestra visita en esta ocasión fue desde Puno.
Llegar hasta aquí es bastante sencillo, existen buses desde todos los terminales terrestres del Perú, ya en el terminal puedes optar por acercarte a una oficina de turismo que ofrece un recorrido guiado y el almuerzo; o llegar por tu cuenta hasta el muelle desde donde salen las embarcaciones hacia las famosas islas artificiales flotantes de los Uros y hasta la isla de formación natural Taquiles.
ISLAS FLOTANTES DE LOS UROS
Este gran lago provee de abundante Tototra que es una planta acuática cuyos beneficios son varios, pero el principal para las comunidades indígenas de los Uros es darles un espacio para vivir. Y no hablo solo de las casas; les hablo te todo el espacio físico de asentamiento que se ubica a unos 15 minutos de distancia del muelle de Puno.
Por lo tanto la formación de estas islas se debe a los Uros quienes realizan todo un proceso desde la consolidación de grandes bloques de tierra con totora para formar la isla, hasta la construcción de sus casas que llega a tardar un año aproximadamente y les permite vivir en ellas hasta 20 años, luego de lo cual construyen una nueva. Además estas islas deben anclarse ya que al ser flotantes se mueven con las corrientes del lago provocadas por el viento.
Por isla viven no más de seis familias cada una con un o una líder; cada 15 días colocan una capa extra de totora sobre la isla, ya que la capa más antigua se pudre y se desintegra, además las casas tienen capas adicionales de totora en sus bases para evitar la humedad. La electricidad la obtienen con paneles solares y viven principalmente del turismo. Se dedican también a la venta de sus tejidos, a la pesca y recolección de huevos de las aves del lugar. SI queires ver un poco más de estas islas puedes ir al video que está al final de esta publicación.
Existe un presidente que es la máxima autoridad de los Uros, él distribuye a los visitantes de forma equitativa hacia todas las islas, de esta manera tú nunca visitarás la misma isla, y los uros reciben ingresos de forma igualitaria. Estas comunidades construyeron una isla más grande en donde se encuentran las aulas de una escuela primaria; para quienes desean continuar sus estudios, deben hacerlo en la ciudad de Puno.





Luego de nuestra visita en las islas flotantes de los Uros, recorrimos el lago hacia el sur durante dos horas para llegar a la segunda isla natural más grande del Tititkaka, ya que la primera se encuentra del lado de Bolivia.





BIENVENIDOS A LA ISLA TAQUILES
Su nombre original es Intika, esta isla está situada a casi 45 kilómetros de la ciudad de Puno y cuenta con una población de casi 2,300 habitantes. En este lugar el punto más alto se encuentra a 4.000 metros sobre el nivel del mar y los taquileños han sabido adaptarse perfectamente.
Intika fue parte del imperio inca y esto se puede evidenciar en varios restos arqueológicos del sector antes de la llegada de los españoles. Posterior a la conquista pasó a ser utilizada como cárcel bajo la corte del español Pedro Gonzales de Taquila, de donde proviene su nombre actual. Fue en el año de 1970 a penas que la isla pasó a pertenecer al pueblo de Taquile, que la habita actualmente.

Es notorio lo distinta que es la vida, lejos de la influencia de la sociedad a la que estamos acostumbrados, sin tanta modernidad ni tegnología. Acá el tiempo va lento, sin ninguna prisa, se respira aire puro y existe un profunda paz y tranquilidad.
Por sus angostas calles, solo circula el peatón; no encontrarás carros, poseen unas pequeñas tiendas que se encargan de abastecerlos con los productos básicos y unas cuantas golosinas.




Tampoco cuentan con hoteles para los turistas ya que tienen su propio modelo de turismo comunitario en el que ofrecen a los visitantes a convivir directamente con ellos poniendo a disposición el hospedaje en casa de una familia taquileña junto a varias actividades culturales. Sin embargo varias agencias externas se han aprovechado de ello. Por lo que si tu deseo es ir, puedes contactarlos directamente a través de su página oficial llamada MUNAY TAQUILE cuyo enlace es http://www.taquile.net/es
Las ovejas o gallinas en el camino, son también parte del paisaje. Basados siempre en los tres principios que caracterizan a las comunidades indígenas: no robar, no mentir y no ser perezoso; viven de manera colectiva. Viven principalmente del cultivo, la pesca y el turismo. Sin duda son destinos que se deben recorrer por lo menos una vez en la vida. Y si quieres ver un poco más de este recorrido, te dejo este pequeño video.
Deja un comentario